jueves, 17 de noviembre de 2016

Índice sobre nuestro Bienestar social, o buen gobierno: Desarrollo humano y Corrupción...

      
  
Hay entre nosotros diversos Estudios que miden o valoran Desigualdades y Pobreza sociales, determinando aspectos relativos a necesidades de la población. Pero un Índice DEC ("Derechos, según las decisiones políticas + Economías efectivas = Coberturas reales"), elaborado por ‘Asociación Estatal de -Directores y Gerentes en- Servicios Sociales’, representa el único Informe que pretende medir o evaluar desarrollos con respecto al Presupuesto y estructuras entre los Sistemas actuales para Servicios correspondientes en España -atendiendo hasta 8 millones de personas- desde 2012.  
  
“Que un país sea democrático no guarda relación con el bienestar social de su población. La esperanza de vida, la mortalidad infantil, la alfabetización y hasta la felicidad no dependen de que un país sea más o menos democrático, sino de la calidad para los Gobiernos; o sea, niveles en Corrupción, nepotismo, abusos del poder, igualdad, respetar minoría y verdaderas igualdades de oportunidades desde la escuela…
  
  
Los datos empíricos nos demuestran que hay dos fuentes fundamentales de insatisfacción en el mundo. La primera es falta de salud. Y la segunda lo que llamamos falta de confianza social; es decir, percepción de que les gobiernan políticos corruptos e ineficaces, que buscan su bienestar y no el de la población.  
 
Para España hoy son muy significativas las diferencias regionales, lo que nos indica cuánto el problema no serían las leyes ni el sistema, sino cómo se comportan los Gobiernos a nivel local: se trata de un país ‘problemático’, pues los partidos y políticos corruptos no tienen menos posibilidades de ser reelegidos”.
  
Lo exponía Bo Rothsein, catedrático director del ‘Instituto para la calidad de Gobiernos (The Quality of Government: Corruption, Inequalities and Social Trust in International Perspective)’ desde Gotemburgo, al presentar su Global Index.
  
  
“Cuando un país pasa de haber estado entre los menos corruptos del mundo a ocupar, nada menos, que otro puesto 30º en pocos años, es que las cosas no van como deberían. Y, si bien España formaba parte en 2008 de la exclusiva lista de los 20 países menos sobornables, ya para 2012 perdió 10 puntos y empezó una caída libre que nos situaba el 2014 en un puesto número 30, según los Índices anuales Percepción sobre Corrupción en ‘Transparency International'.
  
Incluso la Unión Europea, también, está preocupada por cómo andan las cosas aquí: escándalos como los ERE’s fraudulentos de Andalucía, la investigación sobre el desvío de fondos en el sindicato UGT, el caso ‘Nóos’ o el caso Bárcenas, no podían si no pasarnos factura. Por ello, el Grupo de Estados contra Corrupción (GRECO) del Consejo de Europa ha publicado un informe en el que puso en evidencia la ‘proliferación’ de casos de corrupción en España, que ‘atentan gravemente contra la credibilidad de sus instituciones políticas’, y recomienda unos códigos de conductas parlamentarias así como fortalecimientos para la independencia de jueces y fiscales.
  
Constataba cómo ‘ha sido España escenario para verse protagonizados numerosos casos con responsabilidades de corrupción por políticos, funcionarios o emprendedores de primeros órdenes, altísimos’... Y por ello, reclamaba el que se ‘aumente la transparencia en torno a relaciones de los parlamentarios con terceras partes que buscan ejercer su influencia en acciones legislativas, que se dé información sobre las declaraciones de bienes más detalladas actuales y se refuerce supervisión con mecanismos de prevención en el Parlamento’…
  
En juego está, nos decía el GRECO, la confianza de los ciudadanos: tambaleada por cierta crisis económica que ‘acrecentó amplitudes de la desilusión y desconfianza en su ciudadanía’, lo que ha hecho que haya ‘bajísima confianza en la clase política o los partidos’… Y era que -muy precisa mente- tal último informe del CIS destaca cómo la preocupación entre los españoles por esta Corrupción aumentaba 6 puntos y se sitúa como el 2º problema que más inquieta, sólo por detrás del Paro.
  

  
Pero aún es más, el informe hace referencias a los ex-altos cargos públicos ‘lobbistas que, tras del abandonar la Administración pasan inmediatamente a formar parte de los Consejos en Sociedades privadas. Riesgo es que diputados puedan ‘usar su posición parlamentaria asegurándose trabajos en las empresas una vez que dejen el Parlamento’.
    
Lo cierto es que no hay que rebuscar demasiado para encontrar hoy [malos] ejemplos entre nuestros 'dirigentes' políticos que, tras abandonar su cargo, ocupan importantes puestos en grandes compañías como Gas Natural, Repsol, Abengoa, Bansander, Telefónica, OHL o Endesa
   
     
De la mano de la corrupción política, llegan críticas al ámbito judicial, que tienen como punto de partida más riesgos de politización en el Poder Judicial: ‘el modo para su elección permite a Partidos políticos repartirse las vocalías del Consejo General (CGPJ) entre sus candidatos’… Y en relación a la credibilidad que para España merecen sus miembros de la carrera judicial, explica el GRECO que la tendencia es una constante caída desde 2007, similar a la observada con los políticos.
  
Así, el Eurobarómetro del año 2011 reveló cómo un 41% de los encuestados pensaban que 'la corrupción está muy extendida' entre ellos, frente al sólo 17% en la legislatura precedente…”
  
       
  

1 comentario:

  1. Lo publica un diario, como es ‘El Confidencial’, en estos mismos momentos: España está ya hoy al nivel de Moldavia y Kosovo en urgencias del acabar con la CORRUPCIÓN, según últimos ‘Barómetros globales de Transparencia Internacional 2016’ (tras macro-sondeo para el que durante diciembre del 2015 han participado 60.000 personas) de 42 países.

    En concreto, el 67% moldavos, españoles y kosovares preguntados afirman que la corrupción es uno entre los peores males para sus naciones. Y no sólo eso. Los ciudadanos en España, junto a Ucrania, Moldavia o Bosnia-Herzegovina, son los que peor califican el esfuerzo de sus ejecutivos por luchar contra esta lacra. El 80% de los encuestados en las fronteras de nuestro país opina muy negativamente acerca de dicha cuestión.

    En efecto, los resultados específicos del ‘Barómetro realizado por Transparencia Internacional’ para España revelan otros datos muy preocupantes, como que dicho último año (2016) hasta un 28% de los ciudadanos afirman haberse aumentado mucho el nivel de la Corrupción y sólo 37% que se habría mantenido constante.

    Por ejemplo, el 90% de los preguntados en el ‘Barómetro…’ está convencido de que se dan “tratos de favor en las Administraciones”; de la misma forma un 56% considera que “las personas ricas usan su influencia para sus propios intereses” y 61% afirma que el “apoyo financiero de las empresas a los Partidos políticos debería suprimirse” por completo.

    Asimismo, todo un 80% de los españoles encuestados considera que aquí a los corruptos no se les castiga: el 41% está “de acuerdo” con tal afirmación y otro 37% “muy de acuerdo”.

    Paloma Esteban

    ResponderEliminar